Semáforos en el piso para los peatones distraídos por el celular
Será la primera experiencia en la Ciudad de Buenos Aires y, en caso de buenos resultados, prometen expandir la idea a otras esquinas conflictivas; estará listo en julio.
Los más optimistas dicen que los usuarios ven la pantalla 85 veces por día. Los menos, dicen que esa cifra puede trepar a 150. Lo cierto es que la tendencia es clara: cada vez los usuarios miran más lo que sucede en las 5 pulgadas y menos lo que está alrededor. Según datos de Luchemos por la Vida, en 2014 (el último año relevado) el 13,7% de los peatones cruzaba la calle haciendo algo con el smartphone. «Esos números crecieron mucho en los últimos tres años», señala Alberto José Silveira, presidente de la Asociación.
Con el fin de evitar accidentes, el GCBA está instalando en la intersección de la avenida Del Libertador y la avenida Ramos Mejía la primera intervención con luces LED en el pavimento, que «pretende ser una alternativa para aquellos peatones que circulan por la Ciudad pendientes de sus teléfonos, aparatos tecnológicos y otros elementos distractores». Tiene su origen en experiencias que se realizaron en Holanda, en la ciudad de Bodegraven, en Alemania y España. Este año incluso, tuvo su equivalente en Rosario, en las intersecciones de Corrientes y Córdoba.
«El objetivo es que funcione como refuerzo del semáforo peatonal, no como reemplazo», señalan desde el gobierno. Para lograrlo, se realizaron dos prototipos: uno alargado y el otro más pequeño, tipo «tortuga». El segundo fue el elegido por sus características de adaptabilidad y resistencia. Tendrá dos «tiempos»: verde y rojo. Y estarán sincronizados al semáforo peatonal tradicional. Cuando el tiempo de cruce esté por terminar la luz será intermitente, alertando a los peatones sobre el cambio de color.
«La clave de esta intervención tiene que ver con la intensidad de la luz del semáforo horizontal. La misma debe ser más fuerte que cualquier otra distracción que influya al peatón sin alterar la atención de los conductores», explican. Serán en total cuatro tiras de luces led que funcionarán como refuerzo del semáforo peatonal tradicional, con 6 tortuguitas por línea, y cada una de ellas a 40 centímetros de la otra.
Este es el semáforo peatonal
El costo de la obra será cercano a los 200 mil pesos y lo llevará a cabo la empresa Mantelectric. Serán resistentes a los golpes y a la lluvia. Además, al ser estancos, los semáforos estarán sellados con un plástico especial. El objetivo es que la obra quede inaugurada en julio. Y luego expandir la experiencia a otras esquinas conflictivas de la Ciudad, siempre y cuando, aseguran, los resultados sean los que apruebe el Observatorio de Seguridad Vial de la Ciudad, que se encargará de la medición del impacto.
Para Luchemos por la Vida, sin embargo, estas obras no son suficientes para solucionar de manera integral el problema (son más de 12 mil encrucijadas de la Ciudad). «Es una exquisitez que no está mal. Pero creo que es encarar incorrectamente el tema; lo que tenemos que lograr es ayudar a concientizar mejor al peatón para que no cruce utilizando el celular porque no vamos a poder poner esto en todas las esquinas», opina Alberto José Silveira, presidente de la Asociación Luchemos por la Vida.